En el cosmos de la experimentación se encuentra una singularidad común y es el juego entre el lenguaje y la técnica, un juego que siempre está en la búsqueda de explorar al límite la concepción de una idea a través de nuevos procesos creativos que conduzcan a lo inesperado en una simbiosis visual y sonora. Esas ideas que sumergen al espectador en un viaje liberador e incondicional por atmósferas abstractas, narrativas libres o animaciones surreales son la base de este programa.
Fueron 21 cortometrajes seleccionados divididos en dos funciones, la mayoría son del continente americano principalmente Canadá, México y Colombia. Las obras presentadas contienen una gran variedad técnica y conceptual, algunas de ellas son hechas sin cámara, otras son animaciones con una versatilidad estilística destacable u homenajes a personas que preservan la memoria del cine.
Este programa es un compendio de ejercicios de luz que evocan una reflexión sobre nuestra existencia y nos transportan a escenarios más allá de la lógica.