La presente selección de películas construye una columna vertebral, que contrario a la anatomía de los cuerpos humanos no tiene un principio y un fin. La columna vertebral de esta selección de películas experimentales es más parecida a un Uróboros, símbolo proveniente de la cultura griega de una serpiente comiendo su propia cola en forma circular; éste representa el ciclo del eterno retorno a través de la unión de la materia y la espiritualidad, aludiendo a su vez a las acciones de destrucción y creación como irremediables perpetuadoras del ciclo. En el Uróboros,
la serpiente devora su propia cola; de esta manera, la autofagia se convierte en una metáfora de las vicisitudes de la existencia humana necesarias para completar el eterno ciclo vital.
La muestra se desarrolla a través de unas pequeñas etapas, que decidí llamar movimientos, ya que a pesar de su función temporal constituyen acciones inherentes a la existencia humana que tienen que ver más con la movilidad que con la dependencia del tiempo. Invito entonces al espectador a hacer un recorrido por los cuatro movimientos, trazando la ruta que mejor le parezca y reflexionando sobre conceptos como la soledad, la depresión, el suicidio, la transmutación, el renacer, la digestión, y por supuesto la muerte; elementos presentes en esta muestra de películas especialmente bellas en su forma y auténticas en su contenido. El primer movimiento, llamado RENACIMIENTO, nos muestra dos películas con una visión postapocalíptica, onírica, inclusive primitiva del nacimiento y la búsqueda del ser, la conexión del ser humano con la tierra y sus elementos, y la dualidad dominancia/pertenencia entre el humano y la tierra.
MATERIA CONTENIDA, un segundo movimiento con películas que exploran la existencia terrenal humana, solitaria, burocrática, transaccional y sin sentido. Estas películas indagan en la pregunta sobre la esencia del ser; son películas realizadas personales, presas de lo emocional y fenomenológico; las emociones contenidas dentro de lo material del cuerpo humano.
El tercer movimiento SUICIDIO Y EXTINCIÓN, está compuesto por películas hechas con diversas operaciones cinematográficas provenientes de lo matérico del cine, y que indagan sobre las posibilidades de la muerte natural y utoprovocada, sus causas, sus posibles consecuencias, idílicas o terrenales, individuales o sociales, y el inevitable fin de la especie humana.
El último movimiento, AUTOFAGIA, contiene una sola película; un bello ensayo que nos acerca a la destrucción de la materia a través de la ingestión y digestión de la materia y de los cuerpos.
Mediante el recorrido de la muestra, el visitante podrá reflexionar, vivenciar, experimentar, y sobre todo disfrutar de películas hechas con un especial tratamiento estético cercano a la materia en el cine. En mi opinión son películas auténticas y muy bellas, las cuales disfruté enormemente programar, de cara a alimentar el gran corpus de películas seleccionadas en el X Festival de Cine Experimental de Bogotá. Espero que su experiencia sea igual o más satisfactoria.
Por último, invito a los y las navegantes de las muestras presenciales y virtuales, a no dejar de visitar la otra perspectiva de Filosofías y existencialismos, llamada Antología
visual de cuestiones divinas; así como todas las demás muestras, panoramas y retrospectivas que el festival tiene para ustedes.
Curador y programador:
Javier Guáqueta